domingo, 3 de mayo de 2009

Dn. Roberto Cordero Liera

CRONISTA DE ENSENADA

ROBERTO CORDERO LIERA
1918-2006

Heberto Peterson Legrand

Corría aquel lejano 9 de septiembre de 1918 en el apacible pueblito de San Ignacio en Baja California Sur, tierra de misiones, bañado por la tranquilidad que le es propia, cuando broto a la vida Roberto Cordeo Liera. Allí por caminos y veredas corrió, jugo y gozo los primeros años de su existencia: un niño sano rodeado de un entorno que lo mantuvo en contacto con la bella naturaleza de aquellos parajes donde los dátiles de exquisito sabor han dado fama a San Ignacio.
La famosa Misión de San Ignacio fue fundada por los Jesuitas el año de 1728, sin embargo, la construcción del actual edificio es de realización dominica. La Orden Dominica concluyo ésta obra que había quedado inconclusa debido a la expulsión de los Jesuitas el año de 1768 y fue el dominico Juan Crisóstomo Gómez quien la terminó el año de 1786.
De seguro su Madre desde la más tierna edad sembró en su corazón y en su alma la semilla de su Fe Católica que lo acompaño toda su vida, fue un creyente practicante que dio testimonio de ello en su relación con los demás...
Llega a Ensenada y aquí echa el ancla para integrarse, en aquel entonces, a esta pequeña comunidad para luchar e irse abriendo camino en la vida.
Fue un modesto vocero de los periódicos “ El Diario de Ensenada” y “El Mexicano”, un hombre sencillo, transparente, que pronto se gano el cariño de quienes lo trataban. Siempre anido en él la necesidad de superarse, la avidez por encontrar los caminos de realización personal y encontrar en ellos su verdadera vocación.
En lo más profundo de su alma estaba latente la vocación artística esperando poderse manifestar: Las vibraciones y melodías que obsequiaba el violín a quienes le arrancaban sus notas fueron gratas a sus oídos y en él encontró a quien sería su compañero de toda la vida, hasta este 28 de mayo que Dios lo mando llamar para sumarse a los elegidos.
Casado con Doña Elvira Fray y acompañado siempre por ella nunca faltaba a las famosas fiestas de su amado San Ignacio y en las misas los lugareños disfrutaban de las melodías de su exquisito instrumento que su espíritu interpretaba con maestría.
Nuestra Iglesia de San José Obrero en Ensenada ya no podrá ser testigo de las notas de su violín que ocupaban el espacio tocando las fibras más sensibles de los feligreses que acudían a misa.
Don Roberto Cordeo Liera fue el último sobreviviente de aquel famoso y tradicional grupo de cuerda que amenizaba en la famosa cantina “Hussong’s” fundada en el año de 1892, un edificio emblemático donde el Seminario de Historia de Baja California cada año, en Octubre, presenta una conferencia magistral, generalmente sobre algún personaje de Ensenada. Este día se cierra el “Hussong’s” para convertirse por algunas horas en un recinto cultural, evento muy singular.
También será muy gratamente recordado en los afamados restaurantes “El Rey Sol” y “El Cid” donde por muchos años amenizo las tertulias con la belleza de su arte. Desde luego que Don Roberto tocaba varios instrumentos, su talento y amor por la música se lo permitieron.
Don Roberto fue un distinguido y liberado Socio de la prestigiada Sociedad Mutualista “ Progreso” donde fue un miembro ejemplar por su alto sentido del respeto y la convivencia, donde dio muestras de su generosidad, y por que no decirlo, su dulzura propia de los hombres de bien como él.
Platicando en días pasados con mi muy querido amigo Ernesto Sarabia Escandón sobre Don Roberto Cordero pude apreciar como los ojos de Ernesto se humedecían cuando hablaba de las virtudes de quien fue su muy querido amigo.
Dejó en la orfandad a sus hijos Antonio, gran deportista del ciclismo, José, gran softbolista, Hugo, excelente beisbolista, ya fallecido, Cecilia, ya fallecida y Armando, Sergio y Ubaldo, quienes como herencia recibieron no el dinero que nunca tuvo y que hoy se puede tener y mañana no, sino la lección de vida, pues fue un modelo de honestidad, honorabilidad, responsabilidad y de una Fe sólida de amor hacia los demás.
La Sociedad Mutualista “ Progreso” le rendirá mañana un merecido homenaje a quien fue un ciudadano ejemplar, socio distinguido y padre Amoroso.

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